¿Necesitas un poco de serenidad? Estamos con vos! Si el entorno de tu hogar no ha sido el espacio más relajante últimamente, ahora es el momento de recuperar el control. Aquí hay ocho maneras fáciles de hacer que tu hogar sea más tranquilo, nutritivo y relajante.
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1. Editá la paleta.
Los esquemas monocromáticos y los neutros tranquilos son los más relajantes, pero los toques de color suave también pueden ser estimulantes. Considerá guardar algunos adornos y accesorios para simplificar el ambiente.
2. Busca la suavidad.
Las texturas acogedoras se sienten tranquilizadoras, nuestros favoritos incluyen fundas de almohadas de corderito, almohadones de lana natural y mantas de tejido artesanal. Para una textura veraniega, probá con almohadones de flecos.
3. Ordená y guardá todo lo que no sea esencial.
Todo lo que no funciona en tu hogar es muy evidente: asegurate que la entrada esté despejada para que tengas lugar para dejar paquetes, correo, zapatos y abrigos. Despejá la mesada de tu cocina y baño tanto como sea posible, para que sean fáciles de limpiar y se vean ordenados. Es el momento de eliminar elementos innecesarios u obsoletos.
4. Haz de tu dormitorio un santuario.
Este es tu lugar donde podés cerrar la puerta y tener un poco de paz y tranquilidad. Vestí la cama con capas completamente blancas, neutras o de colores suaves; almohadas cómodas (si las tuyas son viejas, ahora es el momento de reemplazarlas); iluminación tenue (si la lámpara de la mesita de noche no se atenúa, probá con bombitas de menos vatios); una vela con tu aroma favorito y una alfombra afelpada debajo de los pies harán que esta habitación se sienta placentera. Guarda la ropa, libros y los objetos intrascendentes para priorizar la calma en este espacio.
5. Agregá vida.
Las plantas nos recuerdan a la primavera, la naturaleza y la vida. Si aún no tenes plantas, implementalas para obtener un poco de belleza verde en tu hogar. Si el cuidado de las plantas te parece demasiado compromiso en este momento, regalate un ramo de flores frescas.
6. Amplificá la luz.
Una buena iluminación es una necesidad, tanto para trabajar como para tu estado de ánimo. Agregá lámparas de mesa donde sea necesario para la iluminación de tareas y lámparas de pie donde necesites más luz ambiental.
7. Hace espacio para la creatividad.
Ya sea que se trate de las obras de arte que cuelgan de tus paredes, o el tejido que estás haciendo frente al TV, la música que estás tocando o escuchando, el rompecabezas en el que estás trabajando o el diario que estás escribiendo, pensá en espacios para la diversión y actividades recreativas que te dan placer.
8. Invitá amigos y familiares.
No en persona, sino a través de fotos y recuerdos personales que son recordatorios importantes de momentos felices y de las personas que amas.
